Version dos (Salta)

Es impresionante como la música clásica puede influenciar en el comportamiento humano. oyendo temas de Bach como doble violin que provocan dos sensaciones en mi. Al comienzo un bienestar infinito, una especie de que bello es vivir, pero poco a poco se va tornando en una tristeza infinita, me siento solo y muy vulnerable.
Todo eso en un solo tema. Luego retoma la alegría y vuelvo a ser feliz. esos cambios van acompañados de un increible efecto placebo.
He tomado una decision, hoy voy a dejar que las cosas sigan su curso. Prometo no reirme de la gente. Prometo no volver a engañar al ciego de la esquina. Prometo no tener miedo. Prometo no tener dudas. Prometo que saltaré y no lloraré. Pero mi puño se aferra a la barandilla, de nuevo la alegria. Recuerdo el primer perro que tuve, era un pastor alemán, de patas grandes y simpaticón, se llamaba Terry, lo solté y murió atropellado. De nuevo tristeza. Recuerdo la muerte de mi hermano, era demasiado jovén, no tendria que haberle dado las entradas para aquel partido. mis dedos se relajan, pero una imagen me inunda, mi primer amor. Alegría. Se llamaba Julieta, estaba locamente enamorado de ella, pase los mejores años de mi vida sin cuestionarme que sería de nosotros...hasta que me dejó, se largó con mi mejor amigo. Tristeza. Miro hacia abajo, que insgnificante parece todo, parecen hormigas, ni siquiera se molestarían si caigo a su lado y chooff! dicen que somos agua..Prometí que no dudaría, miro al cielo tomo aire y me invade el recuerdo. Mi abuelo dándome un caramelo en el pueblo.Alegría. Enseñandome como se cazaban pajaros con la escopeta de perdigones, hasta que le pegué un tiro en el ojo a aquel pobre chico. Tristeza. mi vida ha sido un camino dificil, nunca me salieron bien las cosas. No acabé la universidad, mi última novia murió de cáncer y no tengo trabajo..Una lágrima resbala por mi mejilla. Ni siquiera pude cumplir mi promesa de llorar y ahora me enfrento a lo único que puedo hacer bien. Saltar. Suelto dos dedos, pero otros dos se aferran a la barandilla. miro mi mano. me recuerdan a mi padre. Alegría. Recuerdo a mi padre como el hombre más admirable que jamás pisará la tierra, tenía inteligencia, tenía fuerza, tenía un gran corazón...y ese fue el fallo, su gran corazón...se paró, a veces pienso que si su corazón hubiese sido más pequeño aún estaría vivo. Tristeza. No tengo fuerzas para seguir viviendo, pero no soy capaz de saltar. Angustia. Ni siquiera puedo hacer algo que pensé que no tendria problemas, maldigo mi suerte. Aprieto los dientes, cierro los ojos, dos lágrimas resbalan, tomo aire. Salto.
Una centésima de segundo despues de que mi cuerpo tuviese contacto con la barandilla, rompo mi promesa de nuevo. Miedo. tengo mucho miedo. Dudas. no se si he echo lo correcto, quizas si hubiese...Arrepentimiento. no quiero morir, no quiero mo...CHOF!!

Sobresalto. solo era un sueño, miro a mi alrededor, son las siete de la mañana, me ducho, me afeito, me visto con mis chinos y ese jersey azul que tanto me gusta. Tomo mi desayuno: huevos revueltos y bacon. me encanta empezar fuerte el día. Cojo mi maletín y mi ipod, tomo el ascensor. Piso Decimonoveno. abro la puerta. ando unos pasos y miro al vacio. Suena Bach en mi Ipod. me encanta la musica clásica. Pienso. Es impresionante como la música clásica puede influenciar en el comportamiento humano. oyendo temas de Bach como doble violin que provocan dos sensaciones en mi. Al comienzo un bienestar infinito, una especie de que bello es vivir, pero poco a poco se va tornando en una tristeza infinita, me siento solo y muy vulnerable.
Todo eso en un solo tema. Luego retoma la alegría y vuelvo a ser feliz. esos cambios van acompañados de un increible efecto placebo....

(a ver aclaración, para que no me balaceen y lancen sobre mí falacias sobre que he plagiado, se llama versión 2, porque es una version inspirada del articulo de Jacobo Belbo sobre el suicidio...)